Planta tu semilla positiva
La Semana UMH Sostenible fomenta el respeto al medio ambiente y crea conciencia en la comunidad universitaria
Científicos de la Agencia Nacional de los Océanos y la Atmósfera han mostrado como la Tierra ha alcanzado niveles históricos de dióxodo de carbono (CO2). Un dato que no sorprende por el trato que se le da al planeta, pero que tampoco deja de preocupar a la sociedad por el cambio climático que provoca el aumento de uno de los principales gases causantes del efecto invernadero. Sin embargo, dentro de esta espiral de destrucción de los ecosistemas existen alternativas. Con el fin de mostrar que es posible el equilibrio entre la acción humana y el medio ambiente, la Oficina Ambiental de la Universidad Miguel Hernández de Elche (UMH) ha celebrado, un año más, la Semana UMH Sostenible.
Desde el año 2010 la Oficina Ambiental organiza cuatro días de actividades, ponencias y concursos para enseñar a la comunidad universitaria la importancia del respeto hacia el entorno. Este año el lema de la campaña ha sido: ¿Vivimos en un mundo sostenible? Con los últimos datos de contaminación sobre el planeta la respuesta a esta cuestión parece una utopía. Sin embargo, las actividades llevadas a cabo durante estos días han manifestado que cada persona en su vida cotidiana puede ayudar al cuidado de la Tierra.
[image src=”https://umhsapiens.com/wp-content/uploads/2013/05/tapas2.jpg” width=”300″ height=”200″ lightbox=”yes” align=”left”]Han sido unas jornadas abiertas a los estudiantes, pero también a las personas externas a la institución que quisieron participar y que han animado y llenado talleres como el de yoga o el de plantas medicinales. Para Ilda Caeiru, gestora de la Oficina Ambiental, los objetivos de la semana sostenible en la UMH son crear conciencia, formar y sensibilizar a todos los asistentes de la problemática del deterioro de los ecosistemas. Según Caeiru: “Mostrar cómo nuestra forma de vida repercute en el medio ambiente”.
Se inició la semana con una ponencia sobre la sostenibilidad en la UMH, a la que siguió el taller de fabricación de instrumentos con materiales reciclados desarrollado por el grupo Resonante Sónica. En él enseñaron a crear una flauta y sus diferentes notas musicales con una pajita; o una viola con un bote, varios palos de madera e hilo de pescar. Materiales que son tirados a la basura porque ya no sirven, pero que con ingenio pueden dar como resultado sonidos melódicos.
No se trata solo de reutilizar los materiales y objetos que no conservan su uso original. Muchas personas y comunidades van un paso más allá y optan por hacer de su forma de vida un continuo aporte a la naturaleza, la misma fuente de la que obtienen lo que necesitan. Clara muestra de ello es la permacultura, un sistema sostenible formado por la integración de la vivienda en el paisaje sin perjudicarlo. Este es uno de los métodos de sostenibilidad mostrados en el documental expuesto en las jornadas, “La voz del viento, semillas de transición”. El documentalista y director de la proyección, Carlos Pons, explicó que se podría hablar de conservar el hábitat natural hace diez años, pero que ahora el ser humano ya lo ha destrozado. Según Pons: “En este momento lo que podemos hacer es regenerar, estamos en una situación bastante crítica y algunas personas lo ven y actúan“.
Mostrar el camino que siguen estas pequeñas sociedades permite que las jornadas de sostenibilidad del medio ambiente se fundamenten en la capacidad que tienen las personas para cuidar el planeta. Descubrir que existen numerosas formas de reducir el consumo de bienes primarios y ser ecológicamente sustentables. Pero antes de poder actuar y modular las acciones hacia la sostenibilidad en contacto con la naturaleza, hay que crear conciencia. Esta es otra de las bases que se recalca desde la Oficina Ambiental: “Todos nuestros proyectos van encaminados hacia la sensibilización, concienciar a la gente a ser sostenible”. Por ejemplo, a través del concurso de esculturas, en el que todos los participantes tenían que crear su obra con materiales ya usados o naturales, y donde los premios han sido cestas de productos ecológicos.
[image src=”https://umhsapiens.com/wp-content/uploads/2013/05/productos-ecológicos.jpg” width=”300″ height=”200″ lightbox=”yes” align=”left”]Desde que en 2002 se creó la Oficina Ambiental en la universidad ilicitana, se han llevado a cabo métodos de reciclado y de ahorro de consumo y energía que no solo ayudan a la economía de la institución académica, sino que también muestran la concienciación de toda la comunidad universitaria. Una continua labor que señala la mejora de la convivencia respetuosa de la UMH con el medio. Para la Oficina Ambiental el objetivo no se basa solo en que los estudiantes y trabajadores del centro apaguen una luz que no es necesaria, o tiren en un contenedor, y no en otro, los miles de folios que no necesitan; sino que estos actos vayan encaminados a implantar, en la cotidianidad de la institución y sus alumnos, actividades que aportan beneficios de ahorro energético y bienestar para el medio que les rodea.
Todos los años se celebra un concurso de ideas para fomentar las iniciativas más ecológicas de los universitarios. En 2012 se llevó a cabo la recogida de aparatos electrónicos, en la que se consiguió acumular media tonelada. Para el inicio del próximo curso se volverá a realizar esta campaña, donde los alumnos aportarán sus ideas para una mayor eficiencia de los servicios que ofrece o puede promover la universidad. Porque una sola persona es incapaz de eliminar el cambio climático, pero todos pueden implantar una semilla positiva para suavizarlo, y que no se vuelvan a alcanzar los últimos datos sin precedentes en las emisiones de CO2.
Estefanía Moreno