Un estudio internacional sobre los efectos psicológicos del confinamiento
Analizar los efectos psicológicos de las medidas de restricción de la movilidad que han adoptado la gran mayoría de países para controlar la expansión del coronavirus SARS-CoV-2 es el objetivo del estudio internacional PSY-COVID, en el que participan investigadoras del Grupo Calité Investigación de la Universidad Miguel Hernández (UMH) de Elche. Los primeros resultados obtenidos, que se derivan de una muestra de 5.073 personas que han residido en España durante el confinamiento, muestran que, alrededor del 40% de las personas encuestadas, ha obtenido altos valores en resiliencia.
Colabora de forma anónima en este estudio
Además del grupo Calitè Investigación de la UMH, dirigido por María Virtudes Pérez Jover, en el estudio participan, también, investigadores del Grupo de Investigación en Estrés y Salud de la Universidad Autónoma de Barcelona, del Departamento de Métodos de Investigación y Diagnóstico en Educación de la Universitat de Barcelona, de los Estudios de Psicología y Ciencias de la Educación y del eHealth Center de la Universitat Oberta de Catalunya (UOC), así como un equipo de 80 investigadores colaboradores de 40 universidades de América y Europa
Entre los resultados preliminares del estudio, los investigadores destacan que la pandemia ha tenido un impacto psicosocial considerable en buena parte de la población. Según este primer análisis de los resultados, cerca del 35% de la población estaría en riesgo de sufrir o habría presentado síntomas de ansiedad o depresión, que no significa que hayan desarrollado necesariamente el trastorno, y las mujeres y las personas más jóvenes son las más afectadas. Asimismo, se observa que tener unos hábitos de sueño estables se asocia con niveles más bajos de ansiedad y depresión, así como con una mayor capacidad de adaptación a los cambios.
Por otro lado, se ha observado que, alrededor del 40% de las personas encuestadas, ha obtenido altos valores en resiliencia (resistencia ante las adversidades de la vida). Estos resultados dan pie a pensar que, aunque la pandemia afecta negativamente a la salud mental de algunas personas, buena parte de la población se adapta a la situación de manera satisfactoria y ha salido fortalecida. Por lo tanto, los resultados preliminares de esta investigación permiten empezar a identificar algunos de los grupos de población (mujeres jóvenes) en los que el impacto psicosocial ha sido más intenso, así como cuáles son los factores individuales y del contexto que juegan un papel más relevante en la vulnerabilidad ante trastornos mentales o aquellos que protegen y mejoran la adaptación a circunstancias adversas. No obstante, los resultados definitivos se darán a conocer una vez haya finalizado el estudio de campo, en el que se puede participar a través del siguiente enlace al cuestionario.
Al disponer de los resultados de más de 20 países con un solo modelo de encuesta, será posible determinar si la pandemia afecta de forma homogénea o desigual a personas de distintas partes del mundo, algo que no es posible en la mayoría de estudios, ya que emplean instrumentos de evaluación psicológica diferentes. Esto permitirá conocer cómo afectan las medidas adoptadas por cada gobierno o administración pública y las diferencias socioculturales de cada país a la capacidad de las personas para adaptarse y afrontar la situación actual.