Se la conoce como La Gran Señora de la Prensa, todo un referente de la incorporación de la mujer a la actividad periodística y literaria en la España del siglo XX.
Gracias a su trabajo, descubrimos las herramientas químicas que utiliza el cuerpo para dirigir el crecimiento celular, construir las redes nerviosas y garantizar su supervivencia. Su trabajo permitió entender cómo estos procesos provocar enfermedades como la demencia o el cáncer.