El Hibiscus Sabdarifa reduce la presión sanguínea, el colesterol y la diabetes
Un estudio llevado a cabo por el equipo del profesor e investigador de la Universidad Miguel Hernández (UMH) de Elche Vicente Micol, y probado con pacientes que sufren obesidad, refleja que los polifenoles de los pétalos del Hibiscus sabdariffa reducen notablemente la presión sistólica sanguínea, el colesterol global y la diabetes porque normaliza los niveles de glucosa en sangre.
La primera parte del proceso consistió en la obtención de células de tejido adiposo para su posterior mezcla con Hibiscus. “Comprobamos que al mezclar extracto de Hibiscus con las células sudoríparas la concentración de grasa se reducía”, explica el investigador. El mismo experimento se probó en dos grupos de ratones sin receptor de LDL (lipoproteína de baja densidad), que se considera el receptor del colesterol “malo” ya que puede producir el taponamiento de arterias. A un grupo se le administró una dieta consistente en agua y grasa durante 14 semanas, con lo que se convirtieron en ratones obesos. A otro grupo se le alimentó con la misma dieta grasa y extracto de Hibiscus. Los resultados demostraron que el grupo que tomaba Hibiscus bajó de peso un 15%: “Los triglicéridos en sangre se redujeron a la mitad respecto al otro grupo”, aclara Micol.
Tras los ensayos en modelos celulares y animales, se han tratado 31 pacientes con obesidad y otros problemas derivados como la hipertensión, en el Hospital Universitari Sant Joan de Reus (Tarragona). En el ensayo se ha observado que, tras un mes de tomar disueltos en agua entre 6 y 8 gramos diarios de extracto de Hibiscus Sabdariffa, se mejoran los principales valores del cuadro patológico relacionado con la obesidad. Es decir, disminuye la presión sanguínea (sistólica y diastólica) entre un 10 y un 20%; se reducen de forma significativa los niveles de colesterol, y se normaliza (en muchos casos) el marcador de la diabetes.
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Este resultado es el fruto de tres años de trabajo del equipo Vicente Micol. La investigación se ha financiado con los planes VALi+D y Prometeo de la Generalitat Valenciana, y con el plan CDTI del Ministerio de Economía y Competitividad. “El reto para el futuro es conseguir que los activos de esos 8 gramos diarios consumidos se conviertan en 250 miligramos para suministrarlos en forma de cápsula”, explica Micol.
Lorena Santos
