Alfonso Ases, copiloto de Sabinar Raid UMH: “Somos parte de un gran equipo, no importa terminar primero, sino llegar todos”
El estudiante de Ingeniería acaba de concluir el UniRaid 2017, una prueba de rally muy especial que cruza el desierto marroquí
Alfonso Ases (Alicante, 1990) y su compañero Borja Gallud se aventuraron en una carrera donde la solidaridad es el elemento clave. El objetivo del desafío consiste en entregar el mayor número de material solidario (ropa, material escolar…)en las zonas más castigadas de Marruecos. Durante nueve días, recorrieron el país con su conocido SEAT Panda para hacer posible esta dura tarea.
Pregunta: En Facebook, el lema del equipo es #livethechallenge. ¿Merece la pena vivir un desafío como UniRaid?
Respuesta: Sí, merece completamente la pena. El reto se lo recomiendo a cualquiera porque es una filosofía de vida que lleva a superarte día a día.
P: El presupuesto fue el tema más complicado según comentaron en otra ocasión, ¿Hubo algún momento que pensaron que no saldría adelante?
R: En ningún momento. Nuestra filosofía desde el primer momento fue: “Queremos hacerlo, vamos a hacerlo”. Sabíamos que nos iba a aportar mucho y que si perdíamos dinero no era una pérdida, era una inversión.
Esa filosofía nos ha ayudado a encontrar patrocinadores, nunca tuvimos que decir: “No es que si no me pagas esto no voy a poder ir”. Compramos el coche y empezamos a trabajar a deuda. Luego todo creció y creo que esto fue lo que hizo que los patrocinadores empezaran a apoyarnos.
P: Una de las limitaciones de UniRaid es que los corredores no pueden guiarse con GPS, utilizando un libro de ruta, brújula y mapa. ¿Cómo fue esta experiencia? ¿Hicieron alguna prueba previa?
R: Hicimos más investigación, prueba realizamos dos días. Cuando llegamos allí vimos a algunos equipos bastante más verdes.
A mí como copiloto la experiencia me gustó. Aplicar técnicas que se usan en pruebas profesionales como el Dakar, trabajar roadbook y tener las ideas claras puede costar al principio porque son muchas cosas. Por suerte, pudimos solventar estos problemas a las pocas horas.
P: Porque había tramos que eran desierto completamente abierto…
R: Sí, sin ningún tipo de referencia, algún camino que se cruzaba y poco más. También tuvimos un problema con la brújula (fallaba 100º), pero no llegamos a perdernos en ningún momento. La verdad que el tema de la orientación lo llevamos bastante bien.
“Nuestra filosofía desde el primer momento fue: queremos hacerlo y vamos a hacerlo. Sabíamos que nos iba a aportar mucho”
P: En varios videos se ve mucho compañerismo entre equipos, ¿Formaban una especie de gran familia todos los competidores de UniRaid?
R: A veces se vende la idea del desierto y la soledad. Esto no ocurrió tanto porque todos los participantes sabían que había que llegar a la meta. Lo importante es acabar. No solo importa llegar el primero o ser el mejor, si no que lleguen todos. Entonces sí, todos los corredores éramos un gran equipo.
P: En este contexto, ¿prevalece el espíritu solidario o el espíritu competitivo?
R: Al principio teníamos un poco una mezcla de ambos. Cuando empezó la carrera ya vimos que era completamente necesario ser solidarios entre nosotros y con el propio pueblo marroquí. Al final sacamos como conclusión que para sacar los problemas adelante, hay que ser solidario y trabajar en equipo.
P: Repartieron 60kg de material solidario en aldeas marroquíes, ¿Cuál era el estado real de estos pueblos?
R: He de decir que cuando empezamos a pasar por los pueblos, creíamos que había habido una guerra. Parecían las imágenes que te enseñan cuando acaba de terminar una guerra, y ahí no hubo ninguna. Ellos viven en la extrema pobreza, no tienen nada.
No veías gente que pudiera estar desarrollando un empleo, estaban en la carretera malvendiendo lo poco que tenían y ofreciéndote su hospitalidad. Eso también nos impactó, cualquier persona que te cruzabas te invitaba a su casa, incluso durante varios días. Es una pena porque están en un clima muy desfavorable. Creo que la labor que hemos realizado todos es muy necesaria.
“Cuando empezamos a pasar por los pueblos, creíamos que había habido una guerra. Parecían las imágenes que te enseñan cuando acaba de terminar una guerra, y ahí no hubo ninguna”
P: Y tras cruzar definitivamente la meta, ¿Qué sensación tuvo al ver que la aventura concluía?
R: Personalmente estuve en shock. Descansamos dos o tres horas y tenía la mente completamente en blanco. Luego ya miré en perspectiva y pensé que era un punto y aparte, ya podía descansar físicamente. Estábamos acostumbrados a dormir tres horas entre etapas, saber que podía dormir siete horas fue una bendición.
P: Ya terminada la carrera, les notificaron que habían ganado el Concurso de Medios por la retransmisión de la aventura, ¿Era algo que buscaron o no pensaron en la existencia de este premio?
R: Nosotros intentamos ir a por todo al máximo, no buscamos específicamente este premio. Buscamos explotar todos los ámbitos: solidaridad (metimos todos los kg de material que pudimos en el coche), medios (intentamos grabar y comunicar al máximo nuestro periplo), y luego ganar la carrera.
Fuimos a por todas y creo que en todos los sentidos hemos cumplido nuestros objetivos. El premio fue un regalo y nos sentimos orgullosos por que hayan valorado nuestro trabajo.
Mario Tena
Estudiante de Periodismo de la UMH