Francisco García Olmedo: “El reto es producir más alimento por cada hectárea y hacerlo de la forma más compatible con el medio ambiente”
El recién nombrado Doctor Honoris Causa por la Universidad Miguel Hernández, Francisco García Olmedo, describe la siguiente encrucijada: “Se proyecta que para el 2050 la población superará los 9.000 millones de habitantes y el aumento de la demanda de alimentos puede llegar a duplicarse para esa fecha, pero no se va a disponer de más suelo”. Por lo tanto, a su juicio, “el reto está en producir más por cada hectárea y hacerlo de la forma más compatible con el medio ambiente”.
La investidura de este pionero de la genética molecular de las plantas en España ha tenido lugar durante el acto de celebración de la festividad de Santo Tomás de Aquino. Francisco García Olmedo es licenciado en Química y doctor Ingeniero Agrónomo. Ha investigado sobre ingeniería genética vegetal y, en concreto, sobre la inmunidad innata de las plantas. Además, ha sido autor de las primeras patentes sobre plantas transgénicas realizadas en España y vendidas en el mercado internacional.
Al problema de la escasez de alimentos, el investigador suma los efectos del cambio climático, que también afectan a la distribución y evolución de muchas especies, desde hongos a insectos, que huyen de los incrementos de la temperatura. Esto conlleva, según explica, que el escenario agrícola de la producción de alimentos esté cambiando muy deprisa: “Si no somos capaces de cambiar nuestros métodos de producción al mismo ritmo, vamos a tener una dificultad importante añadida a la ya nada desdeñable del aumento de población”.
Aunque el investigador informa de que la proporción de hambrientos en la actualidad es la menor de la historia, también sentencia que la reciente crisis de precios agudiza el problema: “Cuando el coste de los alimentos está bajo hay 100 millones más de personas que pueden comer que cuando está alto”.
Si el investigador califica al hambre como la gran lacra de la humanidad, por otro lado se refiere a la obesidad como “la gran epidemia del siglo XXI” y advierte de que ya se vislumbra una disminución de la esperanza de vida a causa del sobrepeso. “En un entorno de máxima variedad alimentaria, el problema ha pasado a ser la alimentación en exceso”, sentencia.