¿Por qué no podemos vivir sin Q10?
Cuando se habla del Q10 (CoQ10), generalmente se asocia a algunas cremas faciales. Sin embargo, esta coenzima va mucho más allá de ser un dermocosmético. El Q10 se encuentra en las células del organismo, en concreto en la mitocondria. Es una sustancia liposoluble y similar a las vitaminas sin formar parte de ellas. El cuerpo la sintetiza de forma natural y su función principal es la de producir la energía necesaria para que las células crezcan y se mantengan. Además, tiene una función antioxidante, es decir, protege las células de las sustancias químicas que se llaman radicales libres.
Las mayores cantidades se encuentran en el corazón, el hígado, los riñones y el páncreas. Las cantidades más bajas se encuentran en los pulmones. Además, a medida que la persona envejece, los niveles de CoQ10 disminuyen.
En esta ocasión, entrevistamos a la profesora en el Área de Biología Celular de la UMH, Gema Martínez Navarrete para hablar sobre este tema.