La periodista y escritora Rosa Montero visita la UMH
Decenas de estudiantes, profesores y demás asistentes esperan su llegada impacientes. Ha sido necesario cambiar la ubicación del evento para que todos los presentes pudieran disfrutar del acontecimiento. El silencio unánime en la sala impresiona cuando ella, Rosa Montero, abre la puerta para comenzar el encuentro.
El pasado 26 de febrero, la periodista y escritora Rosa Montero acudía a la Universidad Miguel Hernández de Elche para hablar de sus dos grandes pasiones: periodismo y literatura. El acto comenzó a las 11:30 horas en el edificio Atzavares con unas palabras del profesor José Luis Ferris, quien se encargó de presentar a la protagonista aportando unas breves pinceladas de sus casi 50 años de trayectoria profesional. Tras esto, la conversación fluyó derivando en diferentes temas que mantuvieron a los asistentes con los ojos, y oídos, muy abiertos hasta el último minuto.
Montero comenzó su intervención haciendo especial hincapié en su pasión por el periodismo y la literatura. “Es un lujo haber vivido ambas cosas” destacaba la escritora. Pero aseguró que “lo primero que fui es narradora. Desde que recuerdo, lo hago escribiendo ficción y eso es lo que me permite soportar la vida”. Sin embargo, apuntó que el periodismo le permite estar en continuo aprendizaje. Por eso, animó y alentó a los estudiantes de este misma profesión con sus palabras: “Intentad trabajar en prensa y sobre todo, seguid vuestra pasión. Es un trabajo precioso”.
Durante su discurso, la periodista abarcó multitud de temas. Hubo cabida incluso, para mencionar sus tatuajes, que sin duda alguna destacan en la figura de Montero. Especialmente la salamandra dibujada en color verde que decora su brazo derecho. La escritora expuso su admiración por este animal, símbolo de la regeneración. “El ser humano es así. Tenemos la capacidad de sobreponernos, de sobrevivir”, explicaba Montero a los asistentes.
Los estudiantes de todos los cursos del Grado de Periodismo de la UMH recibieron con especial ilusión los consejos de la escritora, quién confesó haber realizado más de 2000 entrevistas durante su trayectoria profesional. “Cuanto toquéis un tema que os apasione, debéis extremar el cuidado para no ignorar aquellos datos que vayan en contra de vuestras ideas. Si no, el periodismo se podría intoxicar”. Además, también resaltaba la necesidad de hacer buenas preguntas: “Puede parecer obvio pero no preguntéis algo que no os interese. Preguntar de oficio es lo peor”.
Tras la intervención de Montero, los asistentes tuvieron la oportunidad de preguntar directamente a la periodista. Algunos de ellos se decantaron por pedirle su opinión personal sobre temas de actualidad, como la pena de muerta, y otros, por preguntarle los ingredientes necesarios para ser un buen periodista. La escritora no dudó: “Hay que ser curioso. Se debe tener un interés constante por aprender pero siempre siendo riguroso y sin caer en nuestros propios tópicos. Y por supuesto, hay que tener ambición por hacerlo lo mejor posible”. Además, Montero también destacó la necesidad de la empatía para ejercer la profesión: “Hay que tener fascinación por entender el lugar del otro”.
El acto concluyó con una sorpresa para la periodista, quien inauguró el aula que le ha sido dedicada en el Edificio Atzavares de la Universidad Miguel Hernández.